Capítulo 2
Harry x Harry
Rick Sánchez |
Capítulo 3: Adiós, adiós y gracias por el Harry
Conclusión: Rick Sánchez
—Eres un tonto, Harry Potter. Y co-como que, algún día lo, perderás todo.
En medio de los eructos, Verres percibió la dureza evidente en la voz de Rick, pero también la tristeza subyacente en la manera que intentaba esquivar su mirada.
—Estoy haciendo todo lo posible para que ese día nunca llegue, Rick. Y puedo asegurarte que ese día no será hoy.
Rick se lo quedó viendo boquiabierto, en una mueca que no era de sorpresa sino de sorna.
—He tomado el ojo, la mano y la pierna del único Harry en el multiverso con inmunidad a las Paradojas temporales. Y de no ser por la Piedra Filosofal y los nanobots de Doctor Stone, créeme que ese ensamblaje habría sido imposible. Incluso ahora mismo no me siento muy sólido que digamos.
Rick tomó otro trago, soltó un eructo, y pareció estar desinteresado. Verres continuó su explicación.
—También he copiado todos sus recuerdos. Primero le llevé a una dimensión de tiempo suspendido y lo engañé para que pudiera experimentar más de cien universos alternos. Eso me dio tiempo suficiente para extraer las memorias de toda su vida y guardarlas dentro de una tarjeta de datos que ahora está dentro de mi cerebro. Puedo acceder a sus recuerdos a voluntad sin que mi cerebro explote por exceso de información.
—¿De dónde sacaste esa tarjeta? —Cuestionó Rick con sequedad.
—La fabricó el Doctor específicamente para esta misión.
—¿Doctor quién?
—No es Doctor Quién, simplemente el Doctor. Ya sabes, el que no llega tarde por la T.A.R.D.I.S.
—Ah, e-ese presuntuoso. —Rick giró los ojos despectivos, y luego volvió a eructar. Uno grande.
—Y tú me ayudaste con tu sintetizador de partículas Rickas para copiar su alma e imprimirla sobre la mía. Hubo menos explosiones de las que esperaba, lo que fue una feliz sorpresa. En cualquier caso, bajo toda percepción y juicio, ahora poseo la misma inmunidad paradójica-temporal del otro Harry. Por lo que cuando me haya zambullido de lleno en el núcleo de la fuente de la paradoja, cerca de mi mundo Prime, pero no demasiado cerca, debería crear una paradoja contra la paradoja, bloqueando la influencia de la Paradoja del Niño Maldito sobre las divergencias superiores de Prime. Ahora, te pregunto Rick, y te pido que contestes con seriedad, ¿encuentras alguna falla en mi plan?
Rick tosió a la mitad de estar ingiriendo su bebida y terminó escupiendo todo sobre su bata blanca desabotonada, sus pantalones y un poco sobre Verres.
—¿Có-cómo que una falla? ¡Hay como, cientos de fallos! Pero primero te voy a señalar la más evidente, tan evidente que un niño de primaria la vería como, como con los ojos cerrados. ¡TE VAS A MORIR HARRY!
Hubo silencio entre ellos.
Estaban sentados al borde de una colina con los pies colgados en el aire. Era un planeta muy pequeño donde podías ver el ocaso y las estrellas cada cinco minutos. Verres tenía la apariencia de Harry Potter alrededor de los cuarenta años y una túnica negra de hechicero.
—Intenté buscar otra solución, pero no la encontré. La Paradoja del Niño Maldito sólo puede ser revertida con el sacrificio de un Harry Potter. Y la vida de un individuo, incluso si es la mía, jamás tendrá tanto peso como la de miles (quizá millones) de mundos. —Verres se esforzó por hablar con voz neutra, sin embargo una nota de pesar se coló en su voz.
—Ahora estás siendo melodramático además de baboso. ¿Un Harry Potter para sacrificar? ¡Tienes una viviendo contigo desde hace un par de meses! Y ya revisé su personalidad, casi idéntica a la del Harry Potter original. Sólo ti-tienes que pedírselo con palabras bonitas y de seguro el pelmazo se sacrifica por voluntad propia o como sea.
—¡Y por eso es precisamente que no le pude explicar lo que iba a hacer! —Exclamó Verres empezando a desesperar.
—¡Y aquí vienes con toda la bazofia de, mi-mi vida no es tan valiosa como la de los demás y, so-soy desechable! —Rick vio que la botella estaba casi vacía, la estrelló contra la arena que era un desierto miniatura y sacó una nueva botella de entre su túnica.
—Rick, como hombre de ciencia, te respeto, ¡pero no puedes negar que la vida de Gryffindor tiene al menos tanto valor como la mía!
—¡Entonces fabrica un cochino clon! Si no quieres que le pase nada malo a tu lindo novio, entonces haz un clon y, ¡problema resuelto!
Verres se puso de pie y dio vueltas por ahí hasta que sus zapatos tropezaron con el mar.
—Primero, no hay garantía de que un clon retendría la inmunidad paradójica-temporal del original. Segundo, no sería ético sacrificar a un Harry Potter, o cualquier otro ser humano, nada más porque es un clon. Tercero, soy un clon y no existe una contradicción en mis argumentos porque estoy eligiendo sacrificarme por voluntad propia. Cuarto, nada de lo que digas me va a hacer cambiar de opinión a menos que sea una solución superior al problema de la Paradoja del Niño Maldito que amenaza mi universo y no el tuyo; no es que tu propio universo te importe más que un cacahuete. Quinto, ¿encuentras una falla en mi plan, sí o no?
Con indignación palpable en el rostro, Rick se levantó y alzó un puño sobre su cabeza. Verres imaginó todos los hechizos y dispositivos que podría haber empleado para su defensa, y optó no utilizar ninguno. Ya había intentado combatir a Rick en el pasado, y la experiencia había sido amarga.
Rick casi descargó el puño. Logró controlarse, y su mano abierta quedó temblando en el aire, muy cerca del rostro de Verres.
—¡Tú eres mío! ¡Hice un pacto para obtenerte! ¡Tu-tu vida no es tu-tuya para desperdiciarla como se te da la jodida gana, Morty! —Gritó Rick hasta que se quedó sin aire en los pulmones.
Verres había relajado todo su cuerpo de manera consciente, aunque sus ojos verdes parecieron destellar con furia por un breve instante. Hubiese visto o no Rick ese destello, lo que hizo después fue pasar la mano por su frente y mostrarse arrepentido.
—Anda ya, lo siento Harry, yo, ya sé que no te gusta que te llame así, pero, bueno, ya-ya sabes, al menos estoy 50% en lo correcto, técnicamente.
De inmediato Verres desapareció de allí usando la Aparición.
Con el ceño fruncido, Rick metió la mano dentro de su bata de laboratorio y extrajo su pistola para abrir portales entre dimensiones. Estuvo apunto de apretar el gatillo, con el rostro retorcido por la ira, sin embargo se detuvo. Se llevó una mano a la cara un buen rato. Cuando removió su mano, parecía estar más calmado.
—Debería decir una frase genial y épica pero no se me ocurre nada. ¿Escuchaste, Dios del universo que no existe? ¡No sé me ocurre nada! ¡Nada! —Gritó Rick, aunque no hubo nadie para escucharlo.
...
Conclusión: Harry Potter
"Querido Gryffindor, si estás leyendo esto, significa que ya hemos vencido sobre la Paradoja del Niño Maldito. Debes estar muy confundido, así que ante todo te pido tranquilidad.
Lo primero es apagar las luces de emergencia y restablecer la fuente de energía regular. Usa el Encantamiento Accio para invocar el control remoto. Luego presiona la secuencia 4, 8, 15, 16, 23 y 42. Cuando las luces del laboratorio hayan regresado a la normalidad, presiona los números 4 y 2. eso tendría que hacer aparecer un diván y una mesa con bocadillos. Si desconfías de mí, pues bueno no te culpo, aunque espero que por lo menos utilices Aguamenti para tomar un vaso de agua.
¿Ya te sientes un poco más calmado? Espero que sí, porque lo siguiente será un poco complicado de entender.
Existen una cantidad infinita de multiversos que, si bien a veces se cruzan entre sí, en realidad son independientes. Cada multiverso gira alrededor de un individuo, tópico u objeto. Nuestro multiverso en particular gira alrededor de Harry Potter. Sé que es difícil pero procura que no se te suba a la cabeza.
Aparte de eso, cada multiverso debe su existencia a una fuente de energía. Se le conoce con varios nombres; yo he optado por Prime porque suena más genial. Otros lo llaman Dios, pero yo no creo en ese tipo de cosas. Como sea, es imposible acceder a Prime. Hay quienes afirman que han logrado comunicarse con Prime y que se manifiesta en la figura de una señora Rubia que se hace llamar J. K. R., sin embargo considero que son unos chalados sufriendo de alucinación cósmica colectiva.
De vuelta a la ciencia. Hay siete universos que giran muy cerca de la órbita de Prime. Son los universos más cercanos, únicamente a una Divergencia de distancia de Prime. Tampoco es posible acceder a ellos. Desprendiéndose de la Primera Divergencia, está la Segunda Divergencia, compuesta por ocho mundos. La Tercera Divergencia está conformada por un número mayor de mundos, aunque no infinito. Y en la Cuarta Divergencia es donde vivimos nosotros, donde es posible el viaje entre universos y las variaciones de todo tipo.
Voy a darte un ejemplo para que te quede más claro. Imagina que Prime es un escritor y que la Primera Divergencia son siete libros que juntos contienen la historia de Harry Potter. Luego hacen ocho películas basadas en los siete libros y esa es la Segunda Divergencia. En la Tercera Divergencia estaría todo el material oficial que se desprende de los libros y las películas (juegos de vídeo, juguetes, parques temáticos, etc.) En cambio la Cuarta Divergencia sería todo lo realizado por fanáticos que no es considerado parte del material canónico.
¿Comprendes a lo que me refiero? Probablemente no, porque eres un Gryffindor. No es que literalmente nuestro multiverso sea la obra de un escritor. Significa que la Cuarta Divergencia es donde las leyes del multiverso son menos rígidas. Tan blandas que incluso podemos tener contacto con las Cuartas Divergencias de otros multiversos.
Entonces, ¿qué podría suceder si un producto de la Cuarta Divergencia entra en contacto Directo con Prime? ¡Una completa catástrofe! Eso es lo que conocemos como la Paradoja del Niño Maldito. Para los que pertenecemos a la Cuarta Divergencia, Prime simplemente está fuera del alcance de nuestra compresión. la Primera Divergencia es perfecta, la Segunda Divergencia es casi perfecta, e incluso la Tercera Divergencia nos parece mejor que la nuestra.
Las reglas de los mundos superiores deben limitar las reglas de nuestro mundo inferior. Así es como debe ser, porque de lo contrario, si un mundo perteneciente a la Cuarta Divergencia pone su débil e inconsistente pie dentro de Prime, se produce una Paradoja. El universo de la Paradoja del Niño Maldito poseía un Giratiempo que rompía las leyes establecidas por la Primera y Segunda Divergencias. ¿A dónde pertenece realmente la Paradoja? No es uno de los siete universos iniciales, y sin embargo rompe las leyes al cruzarse con ellos. Es como si pudiera mirar a la derecha y a la izquierda al mismo tiempo, es una contradicción, un sin sentido, un cáncer que amenaza nuestra existencia.
La Primera, Segunda y Tercera Divergencias tienen la fuerza para sobrevivir a la Paradoja, a diferencia de nuestra débil Cuarta Divergencia. Para seguir con la idea de los libros, imagina que de repente alguien escribió un fanfic. uno realmente malo, y le pagó suficiente dinero al escritor como para que este dijera "oh sí, ahora esto es oficial, de hecho este es el verdadero final de Harry Potter sin importar las contradicciones que surjan por ello, adiós, me voy de vacaciones, salven a las ballenas."
Honestamente, no sabía cómo detener la Paradoja hasta que te encontré. Contigo, podía deshacer todos sus daños, a causa del flujo de tiempo inverso constante inherente a la Paradoja en sí misma, o en palabras más simples, la Paradoja era como un objeto bloqueando el reflejo de un espejo: si removemos el estorboso objeto, el reflejo de la imagen regresa como si nada hubiese pasado, ¿comprendes?
Ahora hablemos de ti, Gryffindor. ¿Por qué eres inmune a la Paradoja? Mi teoría es que fuiste creado personalmente por Prime para destruir la Paradoja, aunque desde luego desconozco los detalles específicos que llevaron a tu concepción. Una posibilidad es que Prime se hubiese fusionado con el semen de James Potter... Supongo que prefieres no pensar en ello, yo tampoco.
En fin, tras unas cuantas investigaciones, determiné que la solución más simple y eficaz era arrojarte dentro de la Paradoja como si fueses una bomba. Si se hubiese tratado únicamente de sacrificar tu vida, te lo habría pedido sin rodeos. Tú estás dispuesto a morir por el bien mayor y todo eso. Pero tirarte allí habría sido un destino peor que la muerte. Habrías absorbido y contenido la energía de la Paradoja, esa fue la razón por la que no moriste incluso cuando todo a tu alrededor pereció. Tú serías como una mano que remueve el objeto que bloquea el reflejo del espejo.
No fui capaz de decirte todo esto antes porque me dio tristeza imaginarte ahí, solo, en medio de la nada. Creo que tarde o temprano te hubieses enloquecido. En mi experiencia las personas pierden la cordura alrededor de los mil años. Así que decidí robar tu destino y tomar tu lugar. Espero que no te moleste. De hecho, espero que estés agradecido. Y espero que muestres tu agradecimiento regresando con tu familia, parece muy linda.
No busques recuperar tu ojo, pierna ni brazo. Gracias a esas partes tuyas que ahora están bajo mi poder podré mantener la Paradoja del Niño Maldito bajo control. No te preocupes por mí, no pienso enloquecer ni morir. En primer lugar voy a romper el récord de números contados bajo un estado de semi-inconsciencia. Hubo un mundo en que un Doctor contó hasta los 3.700 años. Pienso llegar hasta los 4.000, no quiero poner la meta demasiado alta a la primera oportunidad; la segunda vez llegaré a 8.000, y cada vez doblaré ese número. Entre récord y récord mataré unos cuantos miles de años jugando rol conmigo mismo, ya tengo algunas ideas en mi mente.
Usa el Encantamiento Accio para invocar una pistola de portales que dejé por ahí con las coordenadas de tu mundo, sólo aprieta el gatillo, deja la pistola en la mesa, y regresa a tu mundo, te lo mereces.
Atentamente,
Harry James Potter-Evans-Verres"
...
Conclusión: Morty A
Harry se sintió como se había sentido cuando vio las memorias de Severus Snape en el Pensadero. La diferencia era que ahora, en lugar de prepararse para morir, debía prepararse para vivir. Antes de usar la pistola, decidió ponerse encima la Capa de Invisibilidad. No quería matar a Ginny y a los niños de un susto a causa de su nuevo aspecto. Mejor que oyeran su voz primero. Luego llegaría una explicación a modo de advertencia, y finalmente le revelaría a su familia y al mundo que se había convertido en Ojoloco Moody 2.0. De hecho, Ojoloco Potter no sonaría tan mal. Seguramente a su hijo James se le iba ocurrir un apodo mucho peor, como Alquimista de Metal o algo por el estilo.
Atravesar el portal fue similar a usar los polvos flu, aunque con menos mareo de por medio.
Harry estaba al frente de su casa, ¡su verdadera casa! No era un sustituto similar de otra dimensión, ¡realmente había funcionado! Verres había vencido sobre la Paradoja del Niño Maldito. Harry sintió la tentación de besar la tierra que pisaba, aunque al final optó por correr hacia su casa. Necesitaba saber que su familia estaba bien.
Se asomó por la ventana y allí vio a su hija Lily Luna desayunando con desgano porque le habían puesto una enorme coliflor en el plato.
Harry sintió lágrimas en sus ojos y no las detuvo. Hacer un Patronus en ese momento hubiese sido muy fácil.
Luego vio a su esposa, Ginny, entrando a la sala, cogida de la mano de otro Harry Potter. Los ojos ojos del usurpador casi se cruzaron con los de Harry, quien por mero reflejo se hizo a un lado y corrió hasta esconderse detrás de un árbol cercano.
¿Quién rayos era ese? ¿Acaso Verres se había equivocado en las coordenadas? Parecía improbable, y como broma no parecía tener mucha gracia. ¿Se equivocaba el propio Harry, al saber y sentir que aquí y ahora, estaba en su mundo? ¡SU MUNDO! ¿Por qué había otro Harry Potter allí, en el lugar que legítimamente era suyo? ¿Acaso era una consecuencia de vencer la Paradoja del Niño Maldito?
¿Qué podía hacer ahora?
Y entonces un nuevo portal se abrió, era del mismo color verdoso que el portal que Harry había usado para llegar. Del portal emergió un anciano con el cabello en puntas y bata de laboratorio.
—Oye Harry, mi radar dice que estás por aquí. ¿Puedes quitarte tu Capa de Imbecilidad y mostrarte ante mí? La alternativa es que empiece a destruir todo, pero creo que le tienes cariño a este lugar y todo eso.
Harry percibió un tono embriagado en el anciano, lo que no le gustó. Por instinto le pareció alguien peligroso. Aunque no parecía ser más que un Muggle con tecnología de avanzada, optó por no oponerse al anciano. Harry descubrió únicamente su cabeza.
—¿Quién es usted?
—¡Harry, mi buen amigo! Me llamo Rick Sánchez y soy el abuelo de Morty. O sea, me refiero al otro Morty, digo, al otro Harry, al que le gusta la ciencia y es amigo tuyo.
—¿Verres?
—¡Exacto! Oye, ¿me prestarías tu ayuda para salvarlo? Tú le caes muy bien.
—Un momento. ¿Por qué hay otro Harry Potter aquí? ¡Se supone que este es mi mundo!
Rick se puso a eructar, se rascó la cabeza y puso cara de incomodidad.
—Pues verás, eh, Harry, ¿cómo te lo explico? Creo que Morty, eh, Harry, el otro Harry, te lo puede explicar. No el Harry de este mundo, sino el mío, el que ahora mismo está atrapado en la Paradoja. Así que, básicamente, ven conmigo si quieres vivir, vivir con las respuestas claro, a eso me refiero. O puedes quedarte aquí como, como un ignorante pervertido que espía a una familia que quizá no sea la suya.
—¡Son mi familia! ¡Lo sé!
—Pues si tuviera ganas de discutir Morty, Harry, quise decir Harry, si tuviese ganas de discutir mi réplica sería que, ¿cómo rayos sabes lo sabes? ¿Has pensado en eso, Harry? ¿Cómo sabes que lo que crees es la realidad y no una simulación de computadora? Pero no tengo ganas de discutir, ¿así que te vienes conmigo o qué?
...
Conclusión: Paradoja del Niño Maldito
86.664, 86.665, 86.666, 86.667...
La nada y el vacío y la ausencia eran, en pocas palabras, aburrido.
Verres no iba a permitir que el aburrimiento lo venciera, había logrado pasar el primer día de su vida infinita con nada excepto sus propios pensamientos para hacerle compañía.
En esos pensamientos estaba sumido Verres cuando un portal verde apareció.
Oh no, fue el único pensamiento que alcanzó a tener.
Dos manos salieron del portal. Una le pertenecía a Gryffindor, quien lo cogió y lo sacó de la trayectoria del rayo de energía blanca que era la Paradoja del Niño Maldito.
La otra mano fue la de Harry, quien sostenía una pistola tan enorme que casi parecía una bazuca.
—¡Regresa a la forma humilde que mereces! —Gritó Rick y disparó.
Entonces la historia que nunca debió ser escrita, el mundo que nunca debió existir, se contrajo en sí mismo y fue como si nunca hubiese existido, o como si todos hubiesen decidido ignorar su existencia.
...
Conclusión: Morty Uno
Estaban de vuelta en el mundo diminuto. Verres estaba sobre la arena del desierto, respirando con dificultad. Harry estaba a su lado, de rodillas, intentando ponerse de pie.
Rick brincó sobre ellos y los inyectó con dos jeringas que tenía, una en cada mano, una para cada uno. Los dos gritaron como adolescentes.
—¿Qué demonios Rick? —Gritó Verres poniéndose de pie, varita en mano.
—Cálmate Morty, sólo me pareció que era hora de todas las respuestas, al menos esa fue la petición de tu querido novio, amigo o lo que sea.
Mientras los otros dos discutían, Harry sintió que estaba bajo los efectos de una Poción Multijugos. Aterrado, fue corriendo hacia el mar miniatura y vio su reflejo. Se había transformado en un chico flaco y cabezón de ojos saltones. Cuando se volteó, vio con horror que la misma transformación le había ocurrido a Verres.
—¿Que rayos le hiciste Rick? ¡Gryffindor no tiene nada que ver contigo y tu obsesión con Morty!
—¡Tiene todo que ver conmigo, Morty! ¿Cuándo vas a comprender que todo gira a mi alrededor? ¡Soy el centro del multiverso! Para evitar confusiones, a ti te voy a llamar Morty Uno, porque fuiste el primero que mandé a fabricar, y a él lo voy a llamar Morty A, porque creo que decirle Dos sería despectivo.
Morty A. Ese anciano acababa de llamarlo Morty A. Harry empezó a hiperventilar, con sus pulmones poco desarrollados.
—¿Qué, qué carajos estás balbuceando Rick?
—Es muy simple Morty Uno, si fueras tan inteligente como crees ya lo habrías entendido. El Harry Potter con inmunidad a las Paradojas fue creado por mí, en un laboratorio, con las memorias de un verdadero Harry Potter pero sin ser 100% Harry Potter, Lo hice con 50% de Morty porque me pareció gracioso, al igual que contigo Morty Uno.
—¿Qué? ¿Gryffindor es un Morty? ¿QUÉ? —Verres gritó con la voz rota y aguda.
—Así es Morty Uno. Lo tuve que fabricar porque pasaba el tiempo y no eras capaz de resolver lo de la Paradoja por tu cuenta. Se suponía que ibas a ser un Morty más inteligente y asertivo pero supongo que los genes tontos de Morty fueron más fuertes que los de ese Harry Potter racional. Honestamente me siento un poco estafado, decidí no destruir su mundo a cambio de ti. Casi me siento tentado a pedir un reembolso, pero me da demasiada flojera volver a ese lugar. De inmediato empiezan a hablar de la Profecía esto y lo otro y que se supone que ya pagaron el precio para evitarla y bla, bla, bla. En fin, eres una decepción Morty Uno, sin embargo te quiero, la próxima vez te pondré un reto más fácil, creo que hice la Paradoja del Niño Maldito sobreestimando tus capacidades.
—¿TÚ HICISTE LA PARADOJA DEL NIÑO MALDITO? ¿POR QUÉ?
—¡Por dinero Morty Uno, obviamente! Siempre es por el dinero. Me pagaron, y mucho debo decir. Pero el dinero no importa ahora, porque ya me lo gasté. Pero aún nos tenemos a nosotros y, pues, ¡y pues no hay nada malo con que ustedes sean clones de Morty! Tendremos miles de aventuras, ¡mágicas y científicas! Seremos el trío maravilla o como sea, un abuelo buena onda y sus dos nietos con prótesis. Y me gusta más la apariencia que tienen ahora así que la van a conservar, ¿ha quedado claro, Mortys?
Verres se alejó de Rick y se acercó a Harry. En el fondo siempre había sabido que era imposible escapar de Rick, y a pesar de ello el corazón se le estaba hundiendo con todo lo que había pasado. Por lo que estaba sumamente preocupado por Harry.
—Gryffindor, ¿estás bien? Sé que todo esto pinta mal, aunque al menos estamos vivos, y eso es un consuelo, a pesar de que todo esté tan confuso, debes mantener la calma, ¿de acuerdo?
Harry siguió respirando con agitación, queriendo no pensar que en realidad era Morty A, respirando cada vez con mayor esfuerzo, cada vez menos aire llegando hasta sus pulmones, hasta que la garganta se le cerró y el corazón se le detuvo.
Harry, Morty A, se desplomó en medio de convulsiones.
Verres, Morty Uno, se llevó las manos a la cabeza desesperado.
—Puedo arreglarlo. —Anunció Rick, destapando otra botella.
Capítulo 2
Nota de Autor (14 de Octubre de 2019)
Este omake está basado en los libros de Harry Potter creados por J. K. Rowling y el fanfic de Los Métodos de la Racionalidad escrito por Eliezer Yudkowsky y traducido al Español por mí.
Harry x Harry fue posible gracias al apoyo de uno de mis Patrocinadores en Patreon, Javier Cruz Esquivel. Este capítulo es el correspondiente a los meses de Septiembre y Octubre. Sin embargo, dicho Patrocinador no podrá continuar con su apoyo, que le agradezco muchísimo por el tiempo que lo pudo hacer. De todos modos había pensado terminar la historia en este punto y proseguir con otro omake, pero ya no será posible, tristemente.
Espero que hayan disfrutado la historia. Quizá sea demasiado complicada, espero que no.
Planeo compilar los tres capítulos en formato PDF y EPUB, espero que estén disponibles en mi blog dentro de unos días.
Puedes aprender más sobre los métodos de la racionalidad leyendo Harry Potter y los Métodos de la Racionalidad. Si quieres ir al infinito y más allá, puedes apoyarme en Patreon
Gracias por leer.
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