5 cosas que me inspiran a escribir - 5 things that inspire me to write

sábado, 6 de diciembre de 2014

Español primero, English second

Un asiento de color verde. En realidad no me gusta el color verde, prefiero el rojo, blanco y negro, por eso Archer se me hace tan genial. De hecho, no relaciono el verde con la esperanza, para mí el verde significa algo que da asco, como una serpiente venenosa o un vomito. U esa es la razón por la que me siento en ese color, como prueba de mi concentración. Si puedo tolerar algo tan desagradable en mis posaderas, puedo escribir sin que nada me distraiga.
Premiarme con un dulce barato. Me recompenso a mi mismo con un pequeño dulce cada vez que logro cumplir con mi meta mínima, 1500 palabras por sentada.
Oír música con audífonos. Me gusta el Rock en diversos idiomas, con audífonos lo puedo disfrutar sin que nadie me moleste y sin que yo moleste a nadie.
Juegos de vídeo. Cuando llego a pausas incomodas, en las que no estoy seguro de que palabra usar a continuación, o incluso un párrafo problemático, cinco minutos a solas con mi amado RPG Final Fantasy Tactics Advance hace que el cielo se despeje.
Silencio. En esta época moderna, el silencio es un regalo tan escaso. Encontrar lugares sin bullicio se convierte en una cruzada colosal. ¡Dios bendiga las bibliotecas y los cuartos con puertas!

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A green chair. I really don't like green color, I like more red, white and black, that's why Archer is so cool for me. In fact, I don't associate green with hope, for me green means something that gives creeps, like a poison snake or a vomit. And that is the reason for me sitting in that color, as a proof of concentration. If I can tolerate something so disgusting under my buttocks, I can write without nothing distracting me.
Reward myself with a cheap candy. I treat myself with a small candy every time I accomplish my minimal goal, 1500 words for sitting.
To listen music with headphones. I like Rock in various idioms, with headphones I can enjoy it without no one bothering me and without me bothering anyone else.
Video games. When I come to uncomfortable pauses, in which I am not sure of what word to use next, or even a problematic paragraph, five minutes alone with my lovely RPG Final Fantasy Tactics Advance makes the sky clear.
Silence. In this modern age, silence is a gift so rare. To find places without noise becomes a colossal crusade. God bless libraries and rooms with doors!